RESISTENCIA EN DEPORTES DE CONJUNTO
La resistencia es la capacidad del organismo de sostener un esfuerzo eficazmente el mayor tiempo posible (Averhoff y León, 1981), y su entrenamiento tiene dos direcciones fundamentales: el aeróbico y el anaeróbico. En el primero no existe deuda oxigénica, mientras que en el segundo, el organismo soporta durante tiempo prolongado una deuda de oxígeno.
Los límites de la resistencia aeróbica se alcanzan cuando se necesita producir energía en condiciones anaeróbicas. En los juegos con pelotas, estos dos tipos de resistencia están íntimamente relacionados y no es fácil determinar cuando comienza una y cuando finaliza la otra.
Por eso, algunos autores recomiendan emplear de dos a tres meses del plan de entrenamiento alternando un trabajo aeróbico con otro de acondicionamiento muscular-articular integrado por ejercicios a un volumen grande con intensidades bajas y medias, lo cual permitirá posteriormente, luego de tener una buena base, realizar entrenamientos anaeróbicos de potencia y velocidad sin mayores riesgos de lesiones (Rodríguez García, 1990).
El entrenamiento individual en los deportes con pelotas juega un papel fundamental para la acción colectiva posterior durante la competencia, pues hay que tener en cuenta que todos los organismos no tienen las mismas posibilidades de adaptación; y es aquí donde la educación y mejoramiento de esta capacidad puede determinar un desenvolvimiento y rendimiento óptimos del equipo en una confrontación competitiva.
Experiencias efectuadas en diferentes deportes han permitido dividir por zonas el trabajo realizado, relacionando este con las concentraciones del lactato, los cuales se manifiestan de la siguiente forma:
ZONA ANAEROBICA - ZONA MIXTA - ZONA AEROBICA
No obstante a lo abordado hasta aquí, queremos enfatizar en la multilateralidad del trabajo, la cual en los deportes colectivos, donde los atletas en determinados momentos utiliza una u otra cualidad física para lograr la victoria. Todos conocemos que el entrenamiento provoca cambios bioquímicos, los cuales se manifiestan como reacciones adaptativas del organismo a los distintos trabajos musculares. Las variadas formas de entrenamiento provocan cambios bioquímicos en cada cualidad física, por eso es que por medio del entrenamiento para mejorar rapidez el organismo adquiere características multilaterales, pues no solo el trabajo va a mejorar la rapidez sino que crea condiciones bioquímicas y funcionales para mejorar la fuerza y la resistencia. El entrenamiento de fuerza además de mejorar esta cualidad, crea condiciones para la adquisición de la rapidez, sin influir notablemente en el desarrollo de la resistencia. El entrenamiento de resistencia favorece solo el mejoramiento de esta; a pesar de esto debemos tener presente que esta cualidad, por no ser creadora de bases bioquímicas para las demás cualidades, es que se recomienda no trabajarla con más del 80% de intensidad en los deportes de fuerza rápida y con un volumen moderado, ya que el abuso de estos puede traer desequilibrios. Pero no podemos olvidar que esta cualidad es importante para el sistema humano, por lograr reservas energéticas de glucógeno. Todo lo antes planteado evidencia que solo se alcanzan elevados resultados en los deportes colectivos o individuales cuando el entrenamiento se haya desarrollado sobre la base de la multilateralidad.
En nuestro artículo abordamos algunas consideraciones del tratamiento que se puede dar o tener en cuenta a la hora de impartir la cualidad resistencia en el programa de entrenamiento, tanto para la resistencia general o resistencia aeróbica, como para la resistencia específica o resistencia anaeróbica. En los deportes con pelotas, el segundo tipo de resistencia se manifiesta en múltiples ocasiones durante un partido, el cual alcanza un dinamismo extraordinario por la calidad del contrario.
No olvidemos además que, el balón como mediador entre los contrarios da la posibilidad que se produzcan durante el juego una serie de interrupciones que van desde la pérdida del balón hasta tiempos solicitados, dando la oportunidad muchas veces de que aparezcan procesos de restablecimientos durante los partidos.